Extrema Norte Campeón de Campeones
Escrito por Miguel A. Fernández el 08/03/2012 en Actividades Clubs 4x4
Solo apto para los mejores
Corría 2004 cuando, extinto el Campeonato de España de Trial Extremo, el Club Merindades 4×4 celebró su primera Extrema Norte, para ofrecer una prueba de alto nivel a todos aquellos equipos que se “habían quedado” sin campeonato.
Ahora, ocho años después, y de nuevo a petición de los propios pilotos, equipos y escuderías, el club volvía a organizar una prueba de trial extremo pensada, diseñada y organizada para los mejores pilotos, copilotos y coches con los que contamos en nuestro país en la actualidad, todos ellos con un reconocido palmeres nacional e internacional.
Un trial que se realizaría en el fabuloso circuito de “El Vado”, en las inmediaciones de Medina de Pomar, que el Club Merindades 4×4 gestiona todo el año y en el que entre otras, también se realiza parte de su conocida Invernal Merindades 4×4.
La prueba se celebraría durante las jornadas de sábado y domingo, poniendo a disposición de los participantes diez zonas durante la primera jornada y cinco más para la mañana del domingo.
La jornada del sábado nos recibió con frío y niebla a primeras horas del día, pero según fue avanzando la mañana el uno y la otra fueron desapareciendo para dejar paso a un luminoso sol que caldeó el ambiente y ofreció un día precioso para contemplar una prueba como la que se nos brindaba.
La marcación de las zonas, como se vería ya desde los primeros compases de la prueba, estaba hecha al límite de lo realizable; realizable, porque todas fueron superadas por al menos un coche, lo que efectivamente indica que se podían hacer, pero al límite, porque los 60 minutos de tiempo máximo permitido por zona (que en el briefing a los participantes les pareció excesivo), se mostraron claramente insuficientes para la mayoría de los equipos en la mayoría de las zonas.
Lo anterior motivó, que la organización decidiera en la pausa del mediodía, notificar a los equipos que se eliminaba el tiempo máximo de una hora para cada zona, decisión muy acertada pero que olvidaron matizar poniendo un nuevo tiempo máximo, lo que motivó que algún participante, “aprovechándose” de la nueva circunstancia, al romper dentro de una zona, no la abandonase, reparando dentro de ella, para finalmente terminarla en un plazo superior a las tres horas.
Esto no supuso demasiado problema para el resto de participantes, porque las diez zonas habilitadas para el sábado eran más que suficientes para que siempre hubiese alguna libre que poder realizar, sin embargo, podría no haber sido así y esto debería evitarse para futuras ediciones.
En cualquier caso y como ya hemos apuntado, nada de esto empañó el desarrollo de una prueba que hizo honor a su nombre “extrema” y a su apellido “campeón de campeones”, y que brindó al numeroso publico asistente, tanto de Medina de Pomar como de las poblaciones cercanas, un trial en el que se vio un verdadero derroche de técnica por parte de los equipos, amén de un montón de momentos espectaculares provocados por los vuelcos de los que prácticamente ningún coche se libró.
Levantadas de rueda hasta más allá de lo imaginable, colocar los coches con el uso de ambos cabrestantes para realizar los giros más complicados, un recital de energía derrochada por parte de los copilotos que sin un minuto de descanso tiraron de ancla, eslingas, escaleras y cables para irle ganando centímetro a centímetro terreno a las zonas.
Maestría por parte de los pilotos a la hora de dosificar el gas, a la vez que se peleaban con la dirección y soltaban cable de un cabrestante mientras recogían el otro para colocar el coche, amén de los ratos que tuvieron que pasar “cabeza abajo” debido a los continuos vuelcos que unos y otros sufrieron.
Comisarios a la altura de la prueba, controlando cualquier incorrección o incumplimiento del reglamento y a la vez, sabiendo interpretar este con sentido común, permitiendo, siempre con el mismo rasero para todos los participantes, derribos de estaca inevitables por lo estrecho de algunos pasos, etc…
En definitiva, toda una jornada de trial del máximo nivel, que esperamos tenga continuidad, tanto en esta prueba de Medina de Pomar, como en otras que otros clubs entusiastas estén dispuestos a organizar, el ambiente entre organización y participantes, así como el aportado por el numeroso público asistente, así lo aconsejan.
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