Siempre Ruedas y Motor

El fruto de la pasión

Es habitual en las revistas del sector sacar preparaciones hechas por prestigiosos preparadores, en la mayoría de los casos con años de experiencia en el sector, por ello, la preparación que hoy traigo tiene un doble interés, por una parte la discreta, pero efectiva y perfectamente bien terminada preparación de este Mitsubishi Montero, y por otra, la edad de su artífice.

Manuel Gonzalo, más conocido como Manu Pi en el foro del Club Mitsubishi, tiene tan solo 19 años, lo que no le impide tener las ideas más claras que mucha gente que le dobla la edad.

En la actualidad se encuentra cursando el Grado Medio de electromecánica de vehículos, y afirma: “quiero hacer algo de soldadura para ampliar mis conocimientos y en cuanto se pueda, empezar a trabajar, aunque lo ideal y lo que realmente me gustaría es poder montar un taller y poder vivir de ello”

Tras aprender a conducir con tan solo 11 años con un Seat Panda de su padre, su afición por los coches se fue desarrollando poco a poco hasta que este coche entró en casa, en octubre de 2004: “realmente se compró sin intención de llegar a más, lo que ocurre es que mi afición por los coches fue in crescendo tras entrar en el foro del Club Mitsubishi 4×4 Galloper”.

Esta unidad es un Toubkal, una serie limitada del Montero D-ID, con un motor 3200 D-ID V60 con 165 CV de serie al que se le añadió una centralita de +25 CV de NTDD. Esta serie traía de origen los paragolpes en el color de la carrocería, spoiler, lunas tintadas, volante y pomo de cambio en cuero, cromados en el salpicadero, en el paso de las puertas y climatizador.

El uso que se le iba a dar al coche era mixto, utilizándolo tanto para bajar a trabajar a Madrid como para salir al campo, y se empezó a preparar en 2005, siempre teniendo por delante la idea de que las mejoras que se le aplicaran para una conducción off road, no debían de perjudicar notablemente su comportamiento en carretera, dado el uso diario que de él se hacía.

Manu nos cuenta: “En octubre del 2009 participé en mi primer evento en el circuito de Segurilla (Toledo), en la IV KDD Nacional y a partir de hay…. la cosa se complicó, y desde entonces acudimos con el coche a bastantes KDD´s y Concentraciones, en las que conocemos a bastante gente y es un ambiente que nos gusta”

La preparación comenzó poniéndole unas estriberas originales de Mitsubishi, después se montó el Bull Face delantero (la defensa cromada), en Cobra 4×4 y poco a poco se fueron modificando pequeñas cositas, como el recorte de los paragolpes para mejorar los ángulos de serie que se quedaban un poco justos, a continuación se le montó un cubre carter de Soldaduras Carmona y unas llantas desplazadas Mangels con un ET 20 (ET 45 de origen), y unas cubiertas BF Goodrich Mud-Terrain 265/75-16. Posteriormente se le instalaron unas faldillas Sparco en color rojo, un snorkel Cibex, completamente enmasillado y pintado del color del resto de la carrocería y unas rejillas de protección para los faros antiniebla.

Siguiendo con el exterior, además de la bola de remolque desmontable en la trasera, en la parte frontal se le instalaron unos faros de largo alcance BJ Sirius

Como amortiguación lleva montados unos amortiguadores OME Nitro Charger Sport, un 30 % más duros que la serie normal de OME y muelles King Spring Heavy Duty, atrás se le han montado unos limitadores de extensión hechos a medida.

La última instalación en la parte externa del coche ha sido un cabrestante de 12.000 Lbs. con cable de plasma, guía fija y totalmente oculto detrás del paragolpes original, con mando inalámbrico y, oculta tras el paragolpes delantero, la caja de relés con su toma de mando por cable, además, el desconectador de batería del cabrestante, va instalado en el interior del habitáculo, bajo el volante.

En el interior del vano motor, y dentro de una caja instalada en el lugar reservado para la segunda batería, se ha montado un compresor de doble pistón, con doble salida de aire, una ubicada en el paragolpes delantero y otra junto al tapón de llenado del combustible, también podemos ver una batería Optima Yellow Top.

En el interior del habitáculo, al igual que en el exterior, no vemos ninguna “estridencia”, y solo se han añadido los controles necesarios para que las cosas funciones mejor en campo, así, junto a los botones de los asientos calefactables, hay instalada una nueva botonera que, de izquierda a derecha controla el desconectador del ABS, el del control de tracción, los faros largo alcance y el compresor.

Bajo el asiento del conductor lleva instalado un extintor y un inversor de corriente de 1200 W de pico con dos tomas de corriente instaladas en la parte posterior del apoyabrazos delantero.

Salvo la suspensión, que está montada por RC Racing y la defensa delantera en Cobra 4×4, el resto de los accesorios, preparación y modificaciones se han hecho enteramente en casa.

Con esto, nos cuenta Manu: “el coche está prácticamente listo de cuantas cosas le queríamos hacer, y ahora lo que está en proyecto es comprarme uno para mí, ya que este es de mi padre, aunque sin duda desde aquí le quiero agradecer el esfuerzo porque de no haber sido por él esta preparación no habría sido posible”

El coche, como se puede ver en las fotos y con la única condición de quitarle las pegatinas, parecería una unidad de fábrica, una unidad muy especial, desde luego, pues el ancho, el alto, el snorkel, la defensa, la plancha cubrecarter… se notan, pero todo está tan bien terminado, que pasaría por una unidad original. En este sentido, es destacable la instalación de las tomas del compresor, perfectamente rematadas, la pintura del snorkel, exacta a la original, o hasta la terminación de algo tan poco estético como son los limitadores de extensión de los amortiguadores.

Sin duda, el resultado no solo es el fruto de la pasión de un joven aficionado, sino de toda una promesa del mundo de las preparaciones, y a buen seguro y de seguir por el mismo camino, muy pronto podamos ver más preparaciones firmadas por “Manu Pi”.

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