Prueba Ssanyong Rexton W RX200 e-XDi 4×4. Más que un SUV
Escrito por Miguel A. Fernández el 23/02/2013 en Pruebas 4x4
En su tercera generación el Rexton recibe un buen lavado de cara, nuevo motor y caja de cambios, aunque quizás lo más destacable de esta nueva versión es lo que no cambia, su tracción 4×4 conectable y una potente reductora.
Y no es que quiera hacer de menos las, como ahora veremos, importantes novedades que aporta, es solo que frente a la manía colectiva de descafeinar cada día más los todo terrenos, Ssanyong mantiene su apuesta de ofrecer al usuario un coche que es mucho más que un simple SUV, con un nivel de equipación muy alto, comparable al del resto de todo caminos, pero con un chasis de largueros y travesaños, un eje rígido y, la ya citada caja reductora, que le sitúa muy por encima de la mayoría cuando las cosas se ponen difíciles.
Novedades
La primera versión del Rexton se comercializó en el año 2001, luego, en el 2006, llegó el Rexton II y, ahora, cuando muchos esperaban la llegada de un nuevo Rexton con carrocería autoportante, la marca surcoreana nos sorprende (a los que nos gusta el 4×4 de manera muy agradable), con esta nueva actualización de su todo terreno que, eso sí, ofrece para quién lo desee, una versión 4×2, practicando la que yo creo que es una política mucho más razonable que la que se hace en la mayoría de las ocasiones, de “asfaltizar” directamente los modelos quitándoles la reductora y sus aptitudes todo terreno para primar el comportamiento en carretera y quedarnos tan solo con la estética. Bien por Ssanyong que sigue valorando a todos aquellos que, sin necesitar un todo terreno para trialear, si les gusta disponer de una capacidad de tracción (y de remolque, como veremos más adelante), muy superior a las versiones 4×2 e incluso a las 4×4 sin reductora.
A primera vista lo primero que apreciamos son los cambios estéticos, que aunque profundos, no le quitan el aire “Mercedes ML”, que desde sus orígenes tuvo.
En su parte frontal lo que más destaca son la nueva parrilla y opticas, que vienen acompañadas de un nuevo paragolpes y capó. En la misma línea, la parte trasera estrena portón, paragolpes y pilotos. Los retrovisores con intermitentes de led y unos nuevos estribos, son otras de las diferencias respecto al Rexton II.
El nuevo Rexton W es más largo (4.755 mm), más ancho (1.900 mm) y más alto (1.840 mm), que la versión precedente. Estas medidas vienen acompañadas de unas cotas de habitabilidad acordes a su tamaño, y lo primero que percibimos al pasar a su interior es que disponemos de un amplio espacio.
Equipamiento interior
El equipamiento es muy completo, ya que lleva de serie climatizador, 6 airbags, control de estabilidad, sistema antivuelco ARP, control de descensos HDC, control cruiser, encendido automático de luces y limpiaparabrisas, volante multifunción, navegador táctil, cámara de visión trasera, asientos, volante y pomo del cambio de cuero, retrovisores exteriores plegables y térmicos, retrovisor interior fotosensible, anclajes Isofix, radio CD con seis altavoces y entradas de USB y auxiliar, llantas de 18”… muy completo, pero con una falta extraña, no tiene ordenador de a bordo.
De igual forma, la terminación y ajuste de los elementos, ha mejorado respecto al Rexton II y dispone de diferentes huecos portaobjetos a lo largo de todo su interior.
Cuenta con 7 plazas, las dos de atrás escamoteables simultáneamente. La fila central tiene los respaldos regulables en inclinación y es asimétrica, bajándose la plaza central y la izquierda juntas, o la plaza derecha por separado. Este tipo de banquetas provoca un curioso efecto en las dos últimas plazas, y es que la que va detrás del asiento doble tiene más espacio para los pies, que la plaza derecha, hecho motivado por los diferentes anclajes de los asientos de la segunda fila.
En cualquier caso, las dos últimas plazas son bastante utilizables a condición de que el o los adultos que las utilicen no sean muy altos y, eso si, que no necesitemos maletero, porque en configuración 7 plazas este queda reducido a casi nada.
Diferente es si vamos en configuración 5 plazas, en la que tendremos un maletero de 678 litros. Si plegamos también la fila central de asientos, entonces pasamos a disponer de un enorme maletero de 2086 litros, más que algunas furgonetas.
Motor
La otra gran novedad del W es su motor, pues abandona el de origen Mercedes para equipar uno propio (el mismo que da vida al Actyon Sports), con una cilindrada de 2.000 c.c. frente a los 2.700 c.c. del anterior.
Como el de antes, sigue siendo diesel, ahora con turbo de geometría variable y entrega una potencia de 155 CV con un par máximo de 360 Nm. unas buenas cifras si tenemos en cuenta que el anterior 2.7 entregaba 160 CV y un par de 340 Nm. lo que en definitiva se traduce en que no solo no va peor a pesar de la menor cilindrada y potencia, sino que además de moverse con la misma agilidad, tiene más par y encima consume menos, alrededor de un litro menos, pues homologa unos consumos que van desde los 7,3 litros de la versión 4×2 hasta 7,9 litros en el 4×4 automático.
Este menor consumo, permite a todas las versiones (salvo la automática), quedarse en el tramo impositivo del impuesto de matriculación del 9,75%.
La nueva caja de cambios, de seis relaciones, también tiene mucho que ver con este mejor rendimiento, y tanto un mejor escalonamiento en las marchas cortas que le permiten mejores prestaciones, como una quinta y sexta (especialmente esta última), muy desmultiplicadas le permiten bajar los consumos y la rumorosidad, manteniendo gracias a la buena entrega de par, una usabilidad que nos permite mantener la última marcha engranada aún en repechos de cierta entidad y, si no queremos aceleraciones fulgurantes, recuperar velocidad con ella engranada sin problemas.
Comportamiento
Con estas medidas, un peso de dos toneladas y un eje rígido detrás, el Rexton W no es lo que se dice un ágil deportivo ideado para estrechas carreteras de curvas. Dicho esto, que cualquiera que esté barajando su compra tendrá meridianamente claro, el comportamiento dinámico del coche es muy noble y no presenta ningún problema aún cuando forcemos la situación más allá del límite razonable, como se puede ver en las fotos de curvas, en las que más allá del límite de los neumáticos, la electrónica hace un fantástico trabajo y conseguirá meter el coche en vereda aunque hayamos sido realmente bruscos.
Las fuertes inclinaciones que vemos en las fotos están más bien provocadas por unos largos recorridos de suspensión, que nos vendrán muy bien en campo, que por una suspensión excesivamente blanda (sin que desde luego sea un portento de firmeza), por lo que no reflejan con fidelidad el buen comportamiento general de la suspensión.
Circulando por autopista, el nivel de comodidad es muy alto y ofrece todo lo que tiene que ofrecer un buen familiar, amplitud, una rumorosidad muy contenida y unas suspensiones que sin ser excesivamente blandas, priman la comodidad. Como detalle que no me gusto, es que la banqueta del conductor es excesivamente larga para los conductores de menor altura (el que esto escribe), algo que supongo, se convertirá en ventaja en el caso de los más altos.
Como ya suponía, en aptitudes todo terreno supera a la mayoría de sus rivales y solo si nos vamos a todoterrenos puros le podremos sacar los colores al Rexton, el ya mencionado recorrido de suspensión, la buena altura libre al suelo (comparado con el resto de SUV de su categoría), su reductora y el buen nivel de potencia, nos permitirán meternos por todo tipo de pistas sin miedo, sabiendo que llevamos un auténtico (civilizado pero auténtico), todo terreno, y solo si nos encontramos con grandes obstáculos le pondremos en problemas, más que nada por su tamaño y las estriberas, que nos marcarán el límite de su ángulo ventral.
De nuevo, la posibilidad de disponer de la reductora, nos permitirá arrastrar pesados remolques, arrancando en cualquier cuesta arriba, por empinada que esta sea, sin hacer sufrir para nada el embrague, algo que, prácticamente ningún otro SUV puede decir.
Conclusión
A lo largo del texto, he llamado al Rexton W, SUV, todo camino, todo terreno… y es que realmente reúne características de todos ellos, su estética moderna y redondeada con un nivel de acabado alto, le permite compararse con otros SUV sea cual fuere su sistema de tracción. Su altura al suelo y su tracción 4×4 le convierten en un auténtico todo camino apto para afrontar viajes por todo tipo de pistas. Su reductora, su chasis “de verdad” y su eje rígido, le dotan de unas cualidades todo terreno solo aptas para vehículos que dignen llamarse así.
Con una muy favorable relación calidad/precio que le sitúan en lo alto de cualquier comparativa en su segmento, ya sea por tener el mejor precio o las mejores prestaciones off road y/o de equipación, el Rexton W es un gran candidato para todos aquellos que siendo como mínimo cuatro de familia y/o necesitando una gran capacidad de carga, viven en zonas rurales o de montaña o son aficionados a todo tipo de salidas campestres acompañados de toda la familia, situaciones todas ellas en las que este Ssanyong, sabrá dar la talla.
Etiquetas: pruebas coches, Ssanyong, Ssanyong Rexton W